La inteligencia artificial (IA) da a un dispositivo una inteligencia similar o que intenta “copiar” a la humana. Deep learning es una tecnología de la IA con la que se ha logrado imitar aspectos del cerebro humano, dando a un dispositivo la capacidad de procesar información para el análisis contextual y la acción.
Las tecnologías de la IA han alcanzado niveles impresionantes hoy en día. En este post, contestaremos 3 preguntas que nos surgen sobre el futuro de la IA.
¿Cómo puede ayudar la IA a la sociedad?
Si la IA se aplica de forma responsable, puede beneficiar mucho a la sociedad. Nos puede ayudar a procesar información y datos que los humanos no pueden. Gracias a ello, avanzamos y mejoramos como sociedad.
Son muchos los sectores en los que la IA puede ayudar, por ejemplo, en medicina son muchos los beneficios, no solo de cara al futuro de la IA, sino los que ya hay hoy en día.
Por ejemplo, la IA hoy en día ayuda con la prevención de suicidios y con la reducción del estrés y de la ansiedad, descubre más aquí.
De cara al futuro, uno de los beneficios de la IA será detectar actos ilegales y resolver delitos, como en la película de Tom Cruiste Minority Report. Gracias a las redes sociales y la inteligencia artificial, la policía puede descubrir quién va a cometer un crimen.
¿Será la inteligencia artificial del futuro superior a la inteligencia humana?
Machine Learning, la capacidad que tienen las máquinas de ir aprendiendo a medida que reciben datos y que les lleva a ir tomando cada vez mejores decisiones, nos demuestra que la IA va evolucionando hacia una inteligencia superior.
Pero, ¿llegará alguna vez a superar a la humana?
Ramón López de Mantaras, profesor de investigación especializado en inteligencia artificial, comenta en este podcast de ESADE que lo que permite al ser humano aprender de forma incremental y continua es «transfer learning» (aprendizaje por transferencia): “cuando nos enfrentamos a un problema nuevo pero que se asemeja a situaciones o problemas que ya hemos resuelto antes, podemos re-aprovechar lo que aprendimos al resolver el problema similar o parecido a este, transfiriendo aquellos conocimientos o parte de ellos –de ahí que se llame transfer learning– adaptados, si es preciso, al nuevo problema que debemos resolver. Y así lo resolvemos con más eficiencia, sin tener que partir de cero cada vez. El aprendizaje artificial es incapaz de hacer esto; el aprendizaje automático no tiene ni la más mínima idea de cómo se podría hacer con una máquina”.
¿Cómo puede impactar la IA en el trabajo en el futuro?
Nos da miedo pensar en cómo puede impactar la IA en nuestro trabajo en el futuro.
¿Es nuestro trabajo demasiado rutinario como para que en un futuro nos sustituya la inteligencia artificial? No lo sabemos pero, por ahora, es muy improbable que nos sustituyan al 100%.
Los humanos poseen una inteligencia que las máquinas, por ahora, no. Como comentábamos anteriormente, el transfer learning hace que la inteligencia humana sea única y, por ahora, insustituible.
La inteligencia humana permite la resolución de problemas, el pensamiento abstracto y el juicio crítico que seguirá siendo importante en los negocios. La parte humana será relevante, igual no en todas las tareas pero sí en todos los sectores.
El futuro de la inteligencia artificial está aquí y no sabemos muy bien cómo evolucionará. Es cierto que la inteligencia humana es difícil de sustituir, pero quién sabe lo que nos deparará el futuro de la IA. El machine learning y deep learning demuestran que este tipo de inteligencia avanza, aprende y se desarrolla sola.
Pero, como todo, su uso puede ser muy positivo y beneficiar a la sociedad.